A través de una prosa deslumbrante y llena de lirismo, en una narración envolvente que rehuye ser encasillada en la novela histórica, el realismo mágico o la poesía, Sarney da vida en este relato a una mujer tan plena de exuberancias y misterios como el contexto del que surge, a la vez que reconstruye un episodio casi olvidado de la historia del Brasil de principios del siglo XX.