Tras muchos años de abandono, la destartalada y ruinosa mansión de Wildfell Hall es habitada de nuevo por una misteriosa mujer y su hijo de corta edad. La nueva inquilina -una viuda, al parecer- no tarda, con su carácter retraído y poco sociable, sus opiniones a menudo radicales y su extraña, triste belleza, en atraerse las sospechas de la vecindad, así como la rendida admiración de un joven e impetuoso agricultor. Pero la mujer tiene, en efecto, un pasado... más terrible y tortuoso si cabe de lo que la peor de las murmuraciones es capaz de adivinar. La inquilina de Wildfell Hall (1848), segunda y última novela de Anne Brontë, une al bello relato de un amor prohibido e invernal el retrato intensísimo del fracaso de un matrimonio degradado por el abuso y la violencia, descrito «como una predilección morbosa por lo grosero, cuando no brutal» que escandalizó y repugnó a sus contemporáneos. De hecho, todavía hoy, la dureza, la audacia y el auténtico rigor de esta novela, siguen siendo igual de sorprendentes y desafiantes.Tras muchos años de abandono, la destartalada y ruinosa mansión de Wildfell Hall es habitada de nuevo por una misteriosa...Anne, la menor de las hermanas Brontë, nació en Thornton (Yorkshire), pocos meses antes de que la familia se trasladara a Haworth, donde su padre, el reverendo Patrick Brontë, había sido nombrado vicario perpetuo. Muerta la madre en 1821, Anne fue educada en familia por su padre y su tía, Elizabeth Brandwell, hasta que a los quince años ingresó en Roe Head, la escuela donde su hermana Charlotte era maestra. Entre 1839 y 1845 fue institutriz en diversas casas, y de su experiencia en este trabajo surgió su primera novela, Agnes Grey que se publicaría en 1847 conjuntamente con Cumbres borrascosas, de su hermana Emily; un año antes, bajo el seudónimo -que nunca abandonarían- de Acton, Ellis y Currer Bell, las tres hermanas habían conseguido publicar un volumen de Poemas. En 1848, aparecería la segunda y última novela de Anne, La inquilina de Wildfell Hall. Poco después, en mayo de 1849, murió de tuberculosis en Scarborough.